martes, 8 de octubre de 2013

Las mentiras del independentismo catalán.

Comienzo escribiendo una reflexión: el lenguaje político está designado para hacer que las mentiras suenen como verdades. Esto está sucediendo acerca de la soberanía o separación de Cataluña.
Los representantes políticos de ERC, CIU y con la colaboración de algunos del PSC nos están llevando a un enfrentamiento y odio a los españoles.
También hay que aclarar que existe y ha existido cierta relajación y dejación por parte del gobierno central actual y de los anteriores, sobre todo, en varias cosas: la lengua, educación, insignias nacionales, justicia, etc,.
Los partidos independientes catalanes utilizan unos eufemismos que no hacen más que enconar o encabronar el ambiente social.
En primer lugar tienen que saber estos señores independientes que jurídicamente no es posible modificar la Constitución a través de un Estatuto.
La Constitución tiene sus reglas para ser cambiadas desde el artículo 166 al 169 que exige unas mayorías y proporciona unos procedimientos.
Las mayorías son muy fuertes, de 3/5 para los títulos normales y de 2/3 para los títulos especiales. Se dice en la Constitución como hay que modificarla, ustedes separatistas, no la pueden modificar por otra vía.
Por cierto, La Constitución establece también que se puede recuperar competencias por el estado en caso de conflicto con la aplicación del artículo 155. Las normas de la Constitución se tienen que respetar.
Por otra parte se va fragmentando la soberanía nacional, porque se han derivado los derechos individuales a los derechos territoriales.
Por eso ustedes separatistas mienten diciéndoles a sus ciudadanos:" oiga que le están robando, es que usted está haciendo un mayor esfuerzo fiscal y otros lugares menos productivos se están beneficiando de él". Pero es que eso no es verdad, porque la persona que gana equis millones en Barcelona, Sevilla, Albacete, paga lo mismo esté donde esté. Por esta razón con el mecanismo de financiación que se pretende se violan los principios de igualdad, solidaridad interterritorial, y el principio, el artículo de prohibición de que formar una Comunidad Autónoma supongan privilegios económicos o sociales. Los artículos más importantes de lo referido anteriormente, están en el 139.1, el artículo 2 y el138.2.
La ideología independentista catalana descansa en las siguientes falacias:

a) Falacia histórica. No interpretan bien la Guerra de Secesión.

b) Falacia constitucional. La sentencia del Tribunal Constitucional 31/2010, de 30 de junio.

c) Falacia del mantenimiento en la Unión Europea.

d) Falacia del apoyo internacional.

e) La falacia final: el derecho a decidir.

Todas estas falacias desembocan en el sofisma más repetido: el derecho a decidir.
¿ Pero no deciden ya los ciudadanos catalanes en elecciones a Cortes Generales, al Parlamento de la Comunidad, municipales y europeas? ¿ Eso no es decidir? Llaman derecho a decidir a convocar un referéndum sobre la independencia, que es distinto. Si no oponemos resistencia a estos vicios del habla, nos podrán decir aquello de mundus vult decipi, ergo decipiatur, " el mundo desea ser engañado, pues que sea engañado" o, peor aun, lo de Adolf  Hitler:"¡ qué suerte para los gobernantes que la gente no piense!"
Hay que recordar que este "caudillo imperial"(Reirchsführer) puso en circulación el más abyecto y repugnante eufemismo de la historia política: denominar "solución final" a la matanza de millones de judíos, gitanos y otros ciudadanos indefensos. Este y Stalin fueron unos verdaderos asesinos y crimnales.
Por último resaltar que LAS COMUNIDADES QUE NO RESPETEN LA LEY SUPREMA QUE ES LA CONSTITUCIÓN SE LES TIENE QUE APLICAR EL ARTÍCULO 155.